se levantaba, con sueño, pero contenta, "hoy va a ser un buen día, mejor que ayer, seguro", el tiempo iba más deprisa a partir de las 10, corría y corría sin dar tregua al cansancio o cualquier intento de pensar en algo. después, llegaba la noche...
odio las noches.
No hay comentarios:
Publicar un comentario